martes, 17 de febrero de 2009

PALABRAS DE COCHEBOMBA


Ybarra, Inocente, Roldán y Durand. Foto: Juan Franco.


El jueves 5 de febrero fui invitado por mi viejo amigo Rodolfo Ybarra a un conversatorio llamado Guerra y Literatura junto a Rafael Inocente y Julio Durand, para contar cómo el proceso de la guerra interna que se vivió en los años 80, determinó e influenció buena parte de la creación de nuestras novelas.

De este conversatorio, se hizo un resumen en video que apareció en Utero.pe, realizado por Jhonatan Castro, en el cual por motivos de tiempo y edición, creo yo, se ha desvirtuado el asunto central del evento y ha devenido en que fue un espacio para que los tres escritores nos quejáramos de la falta de difusión de nuestras obras en los medios, es más como que denunciamos un complot contra las mismas.

Sumado a esto el encabezado que presenta el video se torna tendencioso al afirmar que Guerra y Literatura se realizó a raíz de la salida de la novela de Iván Thays, Un lugar llamado Oreja de Perro. Como una especie de respuesta a ese libro. Cosa por demás falsa.

No he tenido la oportunidad de conversar con Rodolfo ni con Rafael ni con Julio, sobre este asunto. Por eso voy a poner ciertos puntos aclaratorios desde mi individualidad como autor de Generación cochebomba y participante del conversatorio. Si ellos ven conveniente hacer lo mismo, para aclarar o reafirmar lo que se dijo allí están en su derecho. Por lo pronto yo hago uso del mío.

Antes quiero creer que tanto Jonathan Castro, a quien conozco de una entrevista anterior y OCRAM el responsable de Utero.pe, no fueron mal intencionados al levantar el hecho por el lado de la polémica cuasi farandulera y no por el lado de lo que simplemente se fue a ese conversatorio, hablar de nuestros libros.

1° Si se ve y oye completamente el video mi intervención desde la mesa, se podrá constatar que hablé de cómo hechos de violencia que viví en carne propia desde niño, fueron los ingredientes para que años más tarde me embarcara a escribir mi novela. Desde qué punto de vista fue escrita, cómo llegué a publicarla de manera independiente y la respuesta positiva de los lectores que me han escrito contándome sus impresiones.

2° Ante la ronda de preguntas y la intervención del poeta Feliciano Mejía en la cual hacía hincapié de llamar a sendero luminoso con los términos precisos, en este caso llamarlo por su nombre oficial Partido Comunista del Perú, para no confundir y más aún si uno es escritor o intelectual, mi respuesta fue que si me referí a sendero luminoso de tal forma es porque mi forma de hablar es coloquial, pero que en la novela había tenido mucho cuidado en que los personajes de acuerdo a su posición, se refirieran de la manera correcta. Es decir que un personaje militante de sendero se refería a ellos con los términos que ellos manejaban. Y si era un personaje común y corriente se refería a ellos como lo hace cualquier persona.

3° En ningún momento reclamé una mayor difusión de mi novela en los medios, ni en ningún otro. Lo que sí hice notar es que la respuesta de los lectores ha sido tan positiva que yo preferiría esa respuesta a salir en algún diario específico. Puse el ejemplo de un estudiante de literatura de La Católica que me escribió para anunciarme que iba a hacer su tesis de licenciatura sobre

Generacion cochebomba. O que un estudiante de teología de la universidad San Agustín de Arequipa, me confesaba haber entendido a la juventud de los ochenta a raíz de la lectura de mi novela. O que una adolescente de una escuela secundaria me había enviado una monografía sobre esos años violentos basando el 90 % de sus respuestas en mi libro. “Esas cosas me causan más satisfacción, por ejemplo, que salir en Somos”. Fue lo que dije. No pedí ni reclamé una mayor atención a mi obra, porque no ando tras el reconocimiento de los medios, sino en el de los lectores. De hecho una mayor difusión me interesa, pero no estoy detrás ni rogando a nadie. Es más junto con Julio coincidimos en que se puede usar los medios alternativos, para difundir obras de escritores nuevos.

Hasta ahora las apariciones que ha tenido mi libro en diversos diarios, revistas, programas de radio y televisión, ha sido porque a alguien le pareció interesante lo que propone. Salvo por La Industria de Chimbote, donde mi amigo Augusto Rubio Acosta, me hizo una reseña, al resto no he tenido la oportunidad de conocer personalmente y a quienes estoy eternamente agradecidos.

4° Luego Julio César Vega que estaba filmando, nos hizo una serie de preguntas a los tres. Una fue sobre si aceptaríamos o rechazaríamos una oferta de alguna editorial transnacional para publicarnos. A lo cual yo respondí sin ninguna vergüenza de que una transnacional me ha ofrecido publicar un libro de cuentos y que estoy en conversaciones con ellos. Quizás por el tema de nuestras novelas se pensará que somos de aquellos subtes recalcitrantes que estamos reacios a todo lo que se llame comercialización. No pues, entiendo por comercial, cuando tu obra es digitada por los vaivenes de la moda y el mercado. Pero no cuando lo que haces, lo haces de una manera honesta contigo mismo y con los lectores, y si trasciende y vende ¿Pues qué culpa tiene uno de eso? Es decir voy a seguir escribiendo lo que me salga del corazón y si están interesados en publicarme así sea una editorial grande o pequeña, no me voy a oponer. Y si no, pues haré lo que aprendí con los subtes: Hazlo por ti mismo. Como hice con Generación cochebomba.
La otra pregunta fue si uno debía escribir sobre lo que ha vivido. A lo que dije que no necesariamente uno tiene que haber vivido una situación para escribir sobre ese hecho concreto, el problema está en la honestidad que uno tenga para retratar una realidad determinada.
Por último preguntó nuestra opinión sobre Daniel Alarcón. A lo cual dije que no había leído a Alarcón. Tengo poco tiempo para leer y por eso soy bastante selectivo en mis lecturas, y que aún no encuentro la trascendencia cómo para ponerme a leer algo de él, pero que no descarto hacerlo algún día. En todo caso, por todo lo que se ha armado, me interesa más leer Un lugar llamado Oreja de Perro, para no dejarme llevar por lo que se dice, sino por lo que mi lectura me suscite de esa novela.

5° Luego de esto fui entrevistado por Jonathan Castro que es el realizador del video en mención. Descartando las preguntas referentes a mi libro, fui consultado si había leído La Hora Azul de Alonso Cueto. Sí había leído esa novela y dije lo siguiente: Es una novela muy bien estructurada y que te atrapa fácilmente. Pero que por el tema que trataba esperaba mucho más, para mi gusto como lector. Puse un ejemplo musical para retratar mi impresión: “Pensé encontrarme con una canción de Pink Floyd, y lo que encontré fue una de Miranda”. Pero afirmo que es la visión de Cueto sobre el tema de la guerra y para diferenciarlo de mi novela digo que es su visión desde su posición de clase. Es obvio que Cueto y yo pertenecemos a distintas clases sociales, o para usar términos más modernos, a distintos sectores socio-económicos, y que eso determina lo distinto de nuestra visión en el tema de la guerra interna. Pero lo que no sale en el video es mi afirmación de que me parece muy valido eso, que haya novelas con distintas visiones. Incluso menciono a Oscar Colchado y a Julián Pérez, que tienen libros con visiones distintas a mi novela y la de Cueto, sobre el mismo tema. Por eso coincido con Alfredo Vanini, cuando dice en ese mismo video, de que es bueno que haya visiones distintas y que ninguna puede atribuirse el aura de única y verdadera.

Como es imposible que salga el video completo de mi exposición y la entrevista hecha por Jonathan Castro, veo conveniente consignar estas cosas para que tengan una visión más amplia y real de lo que fue Guerra y Literatura. Porque habiendo pocos espacios donde puedo hablar de mi novela, no voy a desaprovecharla en ir a hablar de otros libros y escritores que a las finales no he leído, como es mi caso con Iván Thays. Es más así lo haya leído, no iría a un conversatorio sobre un tema específico, a perder el tiempo hablando de otro. Y ese día en el Averno fui a hablar de cómo la violencia de los ochenta influenció en la creación de Generación cochebomba.

Solamente en la ronda de preguntas y en la entrevista del video, doy mi opinión de Alarcon y Cueto, ante preguntas concretas, no porque yo tenga alguna necesidad de hablar de ellos, como se está especulando por allí.

Por ende los comentarios donde se nos tilda de envidiosos del éxito ajeno, de llorones que reclamamos mayor difusión, o de resentidos sociales, no tiene asidero porque, al menos por mi parte, no es así. Cada uno es dueño de sus satisfacciones y yo tengo las mías muy bien presentes en cuanto a mi novela, por eso no ando fijándome en los demás. Me gustaría una mayor difusión de mi libro, claro que sí, pero eso no hace que esté detrás de especialistas o de periodistas. Además, como afirmo líneas arriba, existen canales alternativos de difusión tan igual de efectivos que los medios donde, según se dice, se margina a determinados autores. Es más propuse en ese conversatorio que se podría hacer una red alternativa de escritores, donde se difunda lo nuevo, venga de donde venga, de arriba, de abajo o del subterráneo.

Por último quisiera referirme a un post del Señor Gustavo Faverón. Recuerdo que la primera vez que entré a su blog, fue por el tema de Melissa Patiño. Desde allí he estado entrando cuando el tiempo me lo permite o cuando encuentro algo interesante. He participado algunas veces de manera anónima con comentarios, siempre dentro del debate de ideas. Es más recuerdo haberme solidarizado con él por los insultos racistas contra su persona. Odio el racismo y toda manifestación de discriminación, por eso me solidaricé con él a pesar de que existen diferencias en cuanto a nuestras visiones por determinados aspectos de la vida y la política. Y ahora me doy con la sorpresa de que sin conocerme, sin haber intercambiado personalmente palabras, sin saber completamente lo que dijimos los tres escritores en el conversatorio, somos calificados de parlanchines y mequetrefes. Me sorprende porque él siempre reclama por aquellos blogs donde lo insultan y a quienes llama blogs basura. Y ahora él hace lo mismo, cuando lo correcto hubiera sido que refute con ideas lo que en ese conversatorio se habló, así hayan sido las tonterías que se han inventado sobre nuestras intervenciones. Eso es lo correcto de un intelectual como él. Pero no, de frente al insulto ¿Síndrome puerto el hueco?

He leído los comentarios tanto en utero.pe y en el blog de Faverón, y me he reído por cada tontería que dicen muy pomposamente, simplemente porque están hablando de algo que no es. Que somos contraculturales, antistablishment, revolucionarios, etcétera. Al menos por mi parte nunca me he puesto etiquetas de este tipo, es más en una entrevista me preguntaron si soy un escritor subte, a lo cual dije que soy un escritor que escribe sobre los subtes, nada más. Los que me conocen saben cual es mi opinión sobre esos conceptos. Entonces, como se dice, están meando fuera de bacín.

Lo que me llama la atención es la reacción hacia las personas. La mayoría de los que nos descalifican no ha leído las tres novelas, pero hablan de las personas. Conociendo los reclamos de Faverón en contra de los blogs basura, creo que debería moderar los comentarios, pero al parecer como no somos sus amigos, o somos amigos de Ybarra, se regocija en el insulto que ha partido desde su misma persona. Sí es así la cosa, estamos bastante mal con respecto a los llamados intelectuales.

Si por allí alguien sale diciendo que mi novela es mala, que está mal escrita, no me voy a picar porque sé que no le va a gustar a todo mundo, pero el insulto a la persona si me jode y más viniendo de gente que no me conoce. Me gustaría saber si tendrían los huevos suficientes para decirme en mi pepa los insultos que muy comodamente, escriben desde sus teclados. Como dije quizás mi libro no agrade a muchos, no hay problema si la crítica viene por ese lado, porque tampoco fue escrito para agradar gustos refinados. Pero igual, espero lean Generación cochebomba, y me den su apreciación sincera. Por lo pronto tengo el reconocimiento de decenas de lectores, del Perú y el extranjero, que me han enviado Emails con impresiones positivas de mi libro. Ese es el mejor blindaje ante los insultos de personas que se creen muy racionales en sus opiniones, pero que una simple lectura de lo que escriben, basta para saber que están llenas de contradicciones y falta de seriedad.

Esta es mi verdad, y desde ya me solidarizo con Rodolfo, Julio y Rafael.

4 comentarios:

Hernan dijo...

Hola Martín, Rodolfo, Julio.

Coincido plenamente con tus palabras, Martín, con respecto al "crítico" Gustavo Faverón.

A mí también me encantaría saber si este compadrito tendría los huevos necesarios para decirme en mi cara pelada la sarta de insultos personales que escribe desde el cubil que le financia una universidad norteamericana.

Por eso no pienso responderle a un sujeto de trayectoria tan errabunda como Faverón, quien me ataca personalmente sin ningún argumento, porque YO TRABAJO PARA GANARME LOS FRIJOLES EN ESTE PAÍS CORRAL DE CHANCHOS, no tengo tiempo para argumentarle a un necio que desde el saque me insulta: cuando vengas a Lima búscame Faverón y nos encontramos donde quieras para que me digas imbécil, mequetrefe, terrorista, no dudes que acudiré a la cita.

En todo caso, ya Rodolfo Ybarra ha tenido la amabilidad de colgar el texto de las palabras que pronuncié el día del Conversatorio.

A seguir escribiendo y punto.

Salud y Libertad

Rafael Innocente

giacomo dijo...

HOla Martín, regálame tu libro, porque la verdad es que no tengo dinero para comprarte uno. Envíame una respuesta a venghaus00@hotmail.com y prometo escribirte un artículo, pues preparo también uno de Inocente sobre "La ciudad de los culpables". Gracias.
PD. Sobre el dinero es cierto, las mujeres, el alcohol, y el ocio, me tienen ahora sin un peso.

markopunk dijo...

Tenemos el agrado de compartir con usted la alegría de la familia de Foto Club Cusco, al invitarle a participar de la inauguración de nuestra primera exposición en la capital de nuestro país. El evento se llevará a cabo el 02 de marzo del presente a las 20:00 horas en la Galería del Centro Cultural La Noche de Barranco en la Av. Bolognesi 307 – Barranco.

Cordialmente.

Foto Club Cusco

Anónimo dijo...

Yo no fui, me hubiese gustado, sí.

Me parece q los expositores: Martin, Rodolfo y Julio tienen una posición, una visión, una crítica y la expresan largo y tendido en sus libros, mezclando ficción con realidad.

La guerra interna nos tocó de distintas maneras y cada unx lo expresa tb desde lo ke vivió. Me alegra ke Rodolfo, Julio y Martín tenga esa capacidad para transportarnos a esos años violentos a través de la literatura.

Jipi